La gravedad está presente en todas las acciones que llevamos a diario, solo que no la percibimos porque es invisible. Lo que sí es evidente son los efectos que produce. El más importante de ellos es que caminamos con nuestros pies unidos a la tierra y no andamos flotando en la atmósfera. Así como esta, existen muchas otras características de la gravedad que veremos a continuación.
¿Qué es la gravedad?
Antes de detallar las características de la gravedad, vamos a aclarar bien en qué consiste el concepto. Se trata de un fenómeno natural capaz de atraer entre sí objetos con masa. A diario no lo notamos con conciencia; pero a gran escala, la fuerza de la gravedad es notoria en el Universo.
Por ejemplo, está presente en la interacción de planetas con el Sol. Todos los planetas del Sistema Solar son atraídos por la gravedad del Sol. Es así como orbitan a su alrededor a pesar de que grandes distancias los separen.
La gravedad es la que hace que “todo lo que sube vuelva a caer”. Cuando saltamos al aire de inmediato volvemos a la tierra. Esto es gracias a la fuerza de la gravedad presente en nuestro planeta.
Características de la gravedad
Es muy probable que aún falte mucho por conocer sobre la gravedad. Sin embargo, vamos a hacer mención de sus aspectos más importantes, conocidos por la mayoría.
Nombre
Son muchos los nombres utilizados para hacer referencia a la gravedad. Algunos le llaman interacción gravitatoria, otros le conocen como gravitación. En términos más generales nos referimos a fuerza de gravedad.
Descubrimiento
El ser humano siempre tuvo presente que las cosas se caen si una fuerza no las sostiene. El estudio científico de este hecho inició en el siglo IV a.C. cuando Aristóteles, filósofo griego, estableció las primeras teorías.
Llamó “gravitas” a la fuerza que atrae todo hacia la Tierra. Sostuvo que la Tierra era el centro del universo. De igual manera vinculó esa fuerza con el peso. Es así como afirmó que los cuerpos con mayor peso tendrían menor aceleración de gravedad que los objetos livianos.
Más tarde, Copérnico y Galileo Galilei revolucionaron estas teorías, hasta que llegó Isaac Newton. Creó la teoría de la Ley de Gravitación Universal. También llevó a cabo los primeros intentos para medir la gravedad.
Medición de la gravedad
Para medirla se hace uso de la aceleración alcanzada por los objetos que se mueven por la gravedad. Por ejemplo los que van en caída libre. Por lo tanto la gravedad en la superficie de la Tierra es de 9,80665 m/s2.
Dependiendo del aspecto a medir, para la gravedad se utilizan dos unidades distintas. La gravedad medida como fuerza utiliza Newtons (N), la cual equivale a kilogramos de fuerza. Con esta medida se calcula su magnitud o intensidad.
También es posible medir la aceleración ejercida por la gravedad sobre los cuerpos atraídos por otro que poseen mayor masa. En este caso se utiliza m/s2 como medida.
Fórmula
Según la ley de Newton, la gravedad es directamente proporcional al producto de sus masas (m), aunque inversamente proporcional al cuadrado de la distancia (d) que separa el centro de ambos cuerpos.
G = m1.m2/ d2
Gravedad: algunos ejemplos
Para entender la acción ejercida por la fuerza de gravedad podemos observar un objeto en caída libre. La masa del objeto actúa junto a la fuerza gravitatoria.
Cuando un objeto es arrojado en línea recta, su movimiento desacelera paulatinamente hasta hacerlo caer, gracias a la acción de la gravedad. Por último vemos como los planetas orbitan alrededor del Sol. Lo mismo sucede con lunas y satélites que orbitan alrededor de los planetas atraídos por su gravedad.